Cómo las baterías Super B transformaron nuestra vida en autocaravana fuera de la red eléctrica durante el invierno y más allá

Vivir fuera de la red eléctrica no se trata solo de escapar de la rutina; se trata de aprender a hacer que las cosas sencillas funcionen en cualquier lugar. ¿Quieres una ducha caliente después de un largo día en la montaña? Más vale que el sol haya sido benévolo con tus paneles solares. ¿Necesitas cargar tus dispositivos antes de otra aventura? Es hora de comprobar cuánta energía te queda. Cuando vives viajando, esas pequeñas cosas cotidianas se convierten rápidamente en parte de la aventura.

Les presentamos a Lockie y Ash, viajeros, aventureros y narradores de historias a tiempo completo que se propusieron vivir desconectados de la red eléctrica durante todo el año. Su furgoneta camper es mucho más que un vehículo; es su hogar, su oficina y su ventana al mundo. Durante los últimos ocho meses, han puesto a prueba su sistema en todas las estaciones, desde los gélidos inviernos alpinos hasta el abrasador calor del verano, demostrando la enorme libertad que puede brindar un buen sistema eléctrico.

Contada por ellos mismos, esta es su historia. Un vistazo a lo que realmente implica vivir fuera de la red eléctrica, durante todo el año.

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Vivir desconectado de la red eléctrica en una autocaravana durante el invierno

Han pasado nueve meses desde que le hicimos una buena reforma a nuestra autocaravana, con un objetivo claro: vivir desconectados de la red eléctrica durante un invierno alpino. El invierno llegó y se fue, la primavera dio paso al verano, y ahora ha llegado el otoño. Echando la vista atrás, hemos conseguido pasar ocho meses enteros viajando sin apenas tener que pagar por campings ni servicios. Sí, has leído bien: acampamos en plena naturaleza durante casi todo el invierno en medio de la nieve. ¡La primavera y el verano, en comparación, fueron un paseo!

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Estamos mejorando nuestra autocaravana para vivir todo el año de forma autosuficiente.

¿Qué cambió entonces? Sustituimos nuestras baterías antiguas por dos baterías de litio Epsilon Super B de 12 V y 150 Ah, instalamos un sistema de calentamiento de agua Autoterm 4 en 1 y añadimos una baca Unaka para montar los nuevos paneles solares. Estas mejoras nos proporcionaron mayor capacidad de almacenamiento, agua caliente fiable al instante y energía solar que realmente cubre nuestras necesidades energéticas. Todo ello contribuye a que vivir fuera de la red eléctrica sea mucho más sencillo.

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Sistema de energía aislado que sobrevivió a 11 días de tormentas de nieve

Las baterías Super B fueron un verdadero punto de inflexión. Al duplicar la capacidad de nuestras baterías, de repente tuvimos el doble de libertad para vivir sin enchufarnos. En un momento dado del invierno, las tormentas de nieve nos obligaron a quedarnos estacionados durante días, con casi nada de sol llegando a los paneles.

Normalmente, eso habría significado empacar y buscar electricidad, pero con la nueva configuración pudimos aguantar once días completos sin recargar. Eso significó más tiempo para esquiar y explorar, y mucha menos preocupación por encontrar el próximo camping libre. Y cualquiera que haya viajado en invierno sabe lo difícil que es encontrar servicios disponibles, así que esto fue un gran logro.

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Ahorrar dinero viviendo completamente fuera de la red eléctrica

El aspecto financiero era igual de importante. Los campings en zonas turísticas pueden costar fácilmente unos 50 € por noche. A lo largo de toda la temporada, esos gastos se acumulan rápidamente. Poder ser autosuficientes durante tanto tiempo nos ahorró muchísimo dinero, y ese ahorro lo reinvertimos directamente para poder seguir viajando durante más tiempo. Para cualquier viajero en furgoneta, ese es el sueño.

Mantente fresco y con energía durante el calor del verano

Y no solo en invierno las baterías Super B demostraron su valía. En verano, la vida sin conexión a la red eléctrica suele ser más fácil gracias al sol constante, pero las altas temperaturas pueden reducir la eficiencia de los paneles solares. Si a esto le sumamos los ventiladores funcionando toda la noche cuando la temperatura alcanza los 35-40 °C, la energía se agota rápidamente.

Contar con esa batería extra nos permitió viajar sin preocupaciones. De hecho, en todo el verano solo nos conectamos a la corriente una vez, y fue después de una racha de mal tiempo en la que estuvimos varios días en el mismo lugar. Tres meses de viaje con tan solo un día de conexión eléctrica… eso lo dice todo.

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Por qué recomendamos las baterías Super B para viajes fuera de la red eléctrica

En retrospectiva, estas mejoras han transformado por completo nuestra experiencia. Ocho meses viviendo a tiempo completo en una furgoneta podrían haber sido una historia muy diferente sin ellas.

¿Las recomendaríamos? Sin duda. Vivir cómodamente fuera de la red eléctrica durante todo el año solo es posible si puedes contar con tu propia energía para calefacción, iluminación, carga de dispositivos, cocina, refrigeración y todo lo demás. Si buscas esa libertad en tu propio sistema, te recomendamos encarecidamente las baterías Super B.

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